Por qué la persiana hace ruido al subir y bajar

Por qué la persiana hace ruido al subir y bajar

El ruido al accionar una persiana enrollable es uno de los síntomas más comunes de desgaste o falta de mantenimiento. Bien sean persianas de PVC, de aluminio o de madera, el sistema interno depende de un equilibrio entre lamas, guías, eje y rodamientos. Cuando alguno de estos elementos empieza a deteriorarse, aparecen crujidos, chirridos, roces o pequeños golpes repetitivos durante el movimiento.

La fricción entre lamas seca o sin lubricación, las guías de persianas sucias, los flejes desgastados o incluso un desequilibrio en el eje pueden generar ruidos que, aunque no siempre indican una avería grave, sí afectan al confort y pueden empeorar con el tiempo. Otros factores como la acumulación de polvo dentro del cajón, la deformación de lamas por el sol o pequeños desniveles en la instalación también contribuyen a que la persiana no se desplace suavemente.

¿Qué componentes suelen provocar el ruido en la persiana?

El ruido puede surgir en distintos puntos del sistema. Los elementos que más frecuentemente provocan molestias son:

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●       Las guías de persianas: Las guías permiten que las lamas se deslicen sin fricción. Cuando están sucias, sin felpudos o ligeramente deformadas, la persiana roza durante el recorrido. En modelos antiguos o muy usados, los felpudos se endurecen o desaparecen, amplificando el sonido.

●       Los rodamientos de persianas: Los rodamientos de la persiana permiten que el eje gire con suavidad. Si están secos, desgastados o bloqueados, el movimiento de subida y bajada produce crujidos o un sonido metálico. Es uno de los motivos más comunes en persianas que llevan años sin revisiones.

●       Las lamas: En las persianas de PVC, las lamas pueden deformarse por los cambios de temperatura, provocando roces irregulares. En las persianas enrollables de aluminio también puede ocurrir si alguna lama está doblada o se ha soltado de los enganches.

●       El eje: Un eje torcido o mal fijado provoca vibraciones que se perciben como un golpe repetitivo o un sonido continuo durante el uso.

●       El cajón: La falta de aislamiento, acumulación de polvo o pequeñas holguras internas hacen que la tapa vibre durante el movimiento. Por eso muchos propietarios buscan cómo aislar el cajón de la persiana, ya que además del ruido mejora el aislamiento térmico y acústico general.

¿Cómo puedo reducir el ruido sin cambiar toda la persiana?

En la mayoría de los casos, el ruido puede reducirse significativamente con acciones sencillas de mantenimiento:

1.    Limpieza profunda de guías: Retirar polvo, insectos o restos secos y añadir una ligera lubricación específica para persianas mejora enormemente el deslizamiento.

2.    Sustitución de felpudos: Si las guías ya no sujetan bien las lamas, colocar felpudos nuevos elimina el roce directo y reduce la vibración.

3.    Lubricar los rodamientos: Un mantenimiento básico de los rodamientos de persianas consigue movimientos más suaves y silenciosos. Si están muy gastados, conviene sustituirlos.

4.    Revisar el estado de las lamas: Una lama doblada se puede enderezar o cambiar sin necesidad de cambiar la persiana completa. Esto evita roces innecesarios.

5.    Ajustar el eje: A veces basta con asegurar los soportes o corregir su alineación para eliminar ruidos constantes.

6.    Mejorar el aislamiento interior del cajón: Sin profundizar demasiado, añadir material aislante en el interior del cajón reduce vibraciones y evita que el sonido se amplifique.

Todas estas soluciones se pueden aplicar sin tener que sustituir la persiana completa, y suelen prolongar significativamente la vida útil del sistema.

¿Cuándo es necesario sustituir piezas o llamar a un profesional?

Aunque muchas tareas de mantenimiento pueden hacerse en casa, hay situaciones en las que es mejor acudir a un técnico:

●       Cuando los rodamientos de persianas están completamente dañados y requieren reemplazo.

●       Si el eje está torcido, oxidado o no gira correctamente.

●       Si varias lamas están rotas, desencajadas o no suben alineadas.

●       Cuando la persiana se queda atascada repetidamente.

●     Si los recambios de persianas que necesitas son estructurales, como soportes o ejes, que requieren desmontaje del cajón.

●       Cuando existe riesgo de que la persiana se caiga o se salga de las guías.

Un profesional puede detectar fallos que pasan desapercibidos y garantizar que la persiana vuelve a funcionar sin ruidos y con mayor durabilidad.

¿La motorización de la persiana elimina el ruido definitivamente?

La motorización mejora mucho la suavidad del movimiento, pero no elimina el ruido al 100% si el origen está en las guías, lamas o rodamientos. Un motor no corrige piezas desgastadas; simplemente automatiza el movimiento.

Eso sí, tiene ventajas claras:

●       Movimiento más uniforme, sin tirones.

●       Menos golpes bruscos y vibraciones.

●       Menor desgaste de las piezas internas.

En persianas enrollables modernas, motorizar puede reducir gran parte del ruido, pero siempre será necesario revisar y mantener correctamente elementos como guías, lamas y rodamientos. Si estos están en buen estado, la motorización sí puede proporcionar un funcionamiento casi silencioso.

 

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